(Borrador cajoneado hace ya varios meses y que no tengo el menor interés en correjir)
King crimson
RIO / kraut
Genesis, el disfrute de sus pasajes intrumentales
Don caballero, el math rock
Flying luttenbacger
Bandas cruzadas con el jazz
Mi intento de lograr un estilo abstracto pero no caotico con la guitarra
Llega un momento para todo aquel que supo bajar más de dos o tres discos por día en el que básicamente cree haber “bajado todo”. Esa sobredosis de downloads acarrea un grave peligro, en ese afan de querer abarcarlo todo, a veces uno termina quedándose con poco en la mano. Decididamente no he escuchado profundamente ni siquiera la mitad de esos discos, PERO la curiosidad más la facilidad de Internet hace que la recorrida por los blogs buscando “ese sonido”, “ese ítem musical desconocido” que lo pondrá al frente de la carrera de ver –como dijo magníficamente una vez Schantón- “quién tiene la banda ancha más larga”, sea cada vez más esotérica, misteriosa y hasta peligrosa.
No se por que, pero desde siempre, hasta en esos primeros momentos en los que empezaba a compenetrarme con esos disquitos que consideraba “raros”, sabia que una vez cubierta las necesidades de una discografía indie respetable, el próximo paso era el rock progresivo y no el pop comercial (o el hip-hop). Porque esa oposición? Ambos géneros manejan una serie de valores que desprecio -que no hace falta ni tengo ganas de enumerar- en contraposición con esas bandas descubiertas en los albores de la banda ancha (My Bloody Valentine, Joy Division, etc) pero hay (o había) algo en el prog que siempre me llamó la atención mientras que en el pop marketinero (tengo la sensación de que si escucho Beyonce la estoy ayudando a pagar la mansión y los cortes de pelo de mil dólares) no.
Decía: hace bastante en medio de esas búsquedas wikipedicas llegue al Rock In Opossition (AKA rock progresivo para snobs). Los nombres que aparecían eran todos nuevos y apasionantes, las bandas llegaban de Bélgica, Suecia, Francia, las descripciones incluían cosas como “avant-rock”, “experimental” y en general todo un tufillo arty que rodeaban a las bandas que invitaba al melómano incorregible. Pero la palabra “progressive rock” aparecía para ponerlo todo en duda, cuestionando la veracidad (y la calidad) de todo dato presentado anteriormente.
En el medio escucho “Red” de King Crimson. Su disco debut me había parecido increíble pero “Island” un experiencia que prefería olvidar. Este era el desempate, un mal disco los condenaba. Me taparon el c…. De esos cinco temas, un comienzo medio derivativo de (creo) “Providence” lo privó de ser casi perfecto.
Entonces en que quedamos con el prog?
Escucho superficialmente discos de Magma, Art Bears, Henry Cow y Heldon y un único pensamiento llega a mi cabeza: “la puta madre, esto es más rock progresivo que Yes, Camel y Emerson Lake & Palmer juntos!” BUTTTTTTT “esta bueno!”.
Le pido a un amigo prog que tengo que me recomiende un disco para introducirme en el género, se zarpa y me tira Camel, le pido que el objetivo no es ahuyentarme definitivamente sino incitarme a escuchar, “escuchate entonces Selling England by The Pound de Genesis”, mmm te parece…
Sorpresivamente el disco me gusto, me gusto mucho, más allá de cierto barroquismo exagerado en algunos temas, la mayoría tiene unos pasajes instrumentales geniales en los cuales uno puede perderse entre tanto colchón de teclado y cambio de ritmo pero también la voz de Peter Gabriel irritante en esos temas pedorros de los ochenta/noventa (Kiss The Frog) ahora tiene cierta onda como en ese estribillo volador de “Firth of fifth”. Un buen comienzo.
Desde el momento en que empecé a interiorizarme con el indie rock, su historia, las influencias y todo eso, el rock progresivo siempre era visto como el mal, aquello a despreciar. Y parte de razón hay. Pero el tiempo que ha logrado que se reivindique hasta la más grasa de las banda de los ochenta todavía es incapaz de hacer que pitchfork reseñe la reedición de un disco de Focus.
A ver: es hora de blanquearla: cuanto de rock progresivo hay en el krautock? Mmm. Ok, Can no es Gentle Giant ni Guru Guru es Rush pero llegan a resultados no tan diferentes, unos lo hacen a través de la intuición y el ensayo/error, mientras que los otros lo hacen a través del “virtuosismo”. En realidad no es tan así, pero da para pensarlo.
No se si tiene que ver pero
El math-rock (ese hermoso invento de la prensa musical, quién habrá sido el hijodeputa en acuñar semejante etiqueta?) es prog? Mucho afirman que si, basándose principalmente en la complejidad y variedad que presentan muchos de los temas (en general instrumental). Bueno me gusta el math-rock y quiero conseguir cada uno de los discos que aparecen en esta lista http://rateyourmusic.com/list/wago/math_rock_f1
Ojo todavía no puedo sacar opiniones definitivas en base un par de discos que escuche, dentro de los que, encima, cuento los de King Crimson, banda que por ciertas características separo del resto de las bandas prog de la época, a pesar de tener elementos similares, es decir todavía no hay nada que asegure que “Selling England By The Pound” no sea mi amigo negro.
4 comments:
El próximo paso es conjugar el prog copado con tu amor por el indie y bajarte Blueberry Boat de los Fiery Furnaces.
De todas formas coincido en que sumergirse en el RIO, Zeuhl y toda esa movida avant-prog es súper refrescante, cuando empezás a chusmear los charts ves nombres que no escuchaste en tu puta vida y ahí te volvés a dar cuenta de que siempre va a haber territorios inexplorados.
PD: Igual Magma es un garcha, jajajaja.
Basta se acabo, no más postergaciones ¡voy a escuchar a los Fiery Furnaces!
Los primeros minutos de Providence son escalofriantes.
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